Me merezco algo mejor.
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"El único que se
interpone entre la felicidad total y yo es la realidad."
- Douglas Porter
¿Cuántas veces te has ido a la cama pensando
que deberías tener una vida mejor? O una mañana fría tuviste esa sensación que
estás viviendo una vida que no es la tuya. Esa manía de esperar a que una
mañana la sensación desaparezca nos acumula tantos años encima que al despertar
las líneas del tiempo y cicatrices se encuentran en nuestro cuerpo y el
estremecimiento nunca paso. ¿Y si creas
tu propio futuro en vez de esperarlo?
Cada día tenemos dos caminos a
elegir: desde el victimismo o desde la responsabilidad. Es decir puedes ser
víctima de la vida repartiendo culpas a tu alrededor o ser responsable de tus
acciones pero sobre todo de las decisiones y seguir adelante. Cuando vemos el futuro con ilusión, con
esperanza, nuestro día a día no será escaso y pobre, eso se llama la profecía o
atracción. En un horizonte entusiasta, es cuando la vida sucede.
Lo ideal es plantarse ante la idea del
sufrimiento, y saber que el 90% de lo que sucede en el contorno no lo puedes
afectar y lo debes aceptar, y saber en que SÍ puedes influir.
La idea de saber las circunstancias de
lo que somos y el como somos es lo que atraemos en la vida. Por ello debes tener
una visión razonable y saber que mereces algo mejor, otra versión favorable de
ti, una versión amable, que ha hecho las pases con el pasado, que disfruta el
presente y que siente un anhelo del futuro (entendiendo que el futuro es la
meta y que la vida se encuentra en el camino).
Conectar con una parte más profunda de
nuestro ser, fuera del intelecto, esa parte
que nos hace sentir que estamos vivos, que nos llega de sensación de que
todo es posible.
Y es que nuestras creencias
disfuncionales nos marcan y colocan en una enfoque lineal y no de 360º grados,
como debería ser. Nos encerramos a nivel inconsciente que desafía el pensar que
las cosas pueden ser de otra manera, normalmente para mejor. Las
elecciones que hacemos en esos momentos pueden definir el resto de nuestros
días. Por supuesto nos enfrentamos a lo desconocido, la mayoría de
nosotros preferimos dar la vuelta y volver.
Lo que
quiero decir, es que hoy, es un excelente momento para hacer frente a ideas
pasadas, perturbantes casi inexplicables que viven dentro, y decir: ¡ME MEREZCO
LO MEJOR!. Separarse de la manada, de lo tóxico y lo transtornado, salirse del
rol que fue diseñado por una sociedad oprimida, saltar de la caja, huir de las
personas que viven en una penumbra mental; establecer tu visión y recorrerla de
forma apasionante, de forma arrebatada y conmoverse en ese frenesí llamado vida
.

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